Este libro es el segundo de los tres en que la autora basa su relato en personajes protagonizados por mujeres. El primero es “Permafrost” (enlace aquí). Y el tercero es “Mamut”. Se pueden leer en cualquier orden porque son historias independientes.
La narración de esta novela es en primera persona, lo que ha hecho que me sienta más próxima a la protagonista que a otros personajes. Ha conseguido que interiorice los sentimientos e inquietudes de Boulder. Por cierto, no dice en ningún momento el nombre real de la protagonista, tan solo sabremos su apodo. El cual al conocer su significado (en la sinopsis lo dice) deja claro que no está puesto al azar, y aclara mucho de la personalidad de esta mujer.
Es una persona solitaria e independiente que encuentra su zona de confort en un barco, donde trabaja de cocinera. Es su forma de sentirse bien. Hasta que en un puerto conoce a Samsa. Y por ella se va al otro lado del mundo, a Islandia. Cambiando absolutamente su forma de vida. Pues los deseos de su pareja son totalmente diferentes, ya que quiere un hogar para formar una familia y desea ser madre.
Así que la vida de Boulder da un giro completo al pasar de vivir prácticamente aislada de todo y de todos al polo opuesto.
Pero, no es la única que tiene cambios en su día a día, porque la maternidad también influye en el comportamiento de Samsa. Y ambas se verán en un callejón con difícil salida.
Desde el inicio de la novela, por todo lo que va expresando la protagonista, me ha hecho reflexionar, ponerme en su piel y, sobre todo, me ha hecho pensar en las relaciones de pareja, en el vínculo tan estrecho que crea la maternidad, en como pueden cambiar las relaciones con el paso del tiempo y hacer que alguien se sienta fuera de lugar, que tenga la necesidad de volver a reencontrarse consigo misma. Lo que lleva casi como un efecto colateral a intentar la huida, a la necesidad de volver a encontrar refugio.
Algunas frases del libro:
“Creo que he descubierto qué es la felicidad: despertar silbando, no molestar a nadie, no dar explicaciones y desplomarse en la cama al alba, con el cuerpo aturdido por el cansancio y la cabeza despejada de todo el polvo y la hiel.”
“Puedo renunciar a cualquier cosa, porque nada es decisivo cuando te niegas a encerrar la vida en el calabozo de los relatos.”
“El lenguaje es y será siempre un territorio ocupado. Tengo la impresión de que me estacaron en él nada más nacer. Sólo el lenguaje puede lograr que pertenezcas a algún lugar, que no te extravíes. Es un sustrato que nutre. Parece que residiera en la mente, que bajase a la boca y se fundiera en los labios cuando se habla. Pero el lenguaje está en todas partes, ocupa las células más apartadas y las impulsa hacia lugares incomprensibles. Te alienta y te enferma, desorienta a tu instinto animal, te hace humana. Pero también puede ser la más tiránica. Se es responsable de cada palabra, no hay ninguna expresión inocente.”
Contracubierta o parte de esta:
La protagonista de Boulder se gana la vida como cocinera en un viejo barco mercante. Es la situación perfecta: soledad, una cabina, el océano, algún puerto en el que conocer mujeres y horas para encarar el vacío, para sentir la fuerza de la provisionalidad. Hasta que un día una de ellas consigue que abandone el mar, acceda a vivir entre cuatro paredes y se implique en la gestación asistida y en la educación de un hijo. ¿Qué ha hecho la maternidad con la mujer que en su día conoció en un bar de la Patagonia? ¿qué hará ella, animal enjaulado en una casa unifamiliar de Reikiavik?
Todo ha cambiado excepto su apodo, Boulder: esas enormes piedras aisladas en medio del paisaje, expuestas a todo sin que nadie sepa de dónde vienen ni por qué están ahí.
Traducción de Nicole d’Amonville Alegría
Título original: Boulder
Fotografía de la cubierta: Getty Images
Punto a favor que puedan leerse de forma independiente. A ver si me animo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Hola! No conocía este libro pero parece entretenido así que no lo descarto. Muchas gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
Puede gustarme 😀 Tomo nota y mil gracias por la reseña!
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarsi te soy sincera, empecé hace un tiempo la de Mamut y no me enganchó lo suficiente, la abandoné. Se habla maravillas de la autora así que igual le doy otra oportunidad con este, lo que cuentas me atrae mucho, los temas que trata de la pareja y maternidad
Besos