Secretos y silencios durante 33 años, amores imposibles, la vida y la
soledad del escritor, misterios sin resolver, asesinatos, suspense, son temas
que configuran esta novela que reúne historias de varios personajes, aunque
serán Marcus Goldman y Harry Quebert algunos de los más relevantes. Este último
es un escritor estrella, y a la vez un hombre solo. Fue profesor de literatura,
compañero de boxeo, amigo, maestro y mentor de Marcus. Le enseñó a convertirse
en escritor, le instruyó sobre la importancia de saber caer, le enfrentó a sí
mismo, le aleccionó a abrir su mente. En realidad son como padre e hijo. Ahora
le toca al joven escritor ayudarle.
Narrada en tres épocas distintas pero perfectamente integradas, en
ningún momento te pierdes, al revés cada salto en el tiempo, sea presente,
pasado o futuro, se complementa. También intercala una serie de capítulos
breves, con la numeración hacia atrás desde el número 31, que tiene su
significado. Pues son consejos de Harry a Marcus sobre como ser un buen
escritor y escribir una gran novela. Cuestiones que están aplicadas en el
propio libro. Por lo que me han resultado muy interesantes. Siendo curioso, por
ejemplo, cuando habla del sentido particular de las palabras, con la exposición
sobre la palabra “gaviota”. También es precioso cuando dice que “escribir da
sentido a la vida”.
En la trama policial considero importante la figura de Perry Gahalowood,
sargento de la brigada criminal de la policía estatal. Es el encargado de tomar
las riendas de la investigación para averiguar quién mató a Nola Kellergan.
Aunque los pasos y los avances en las pesquisas que van de descubrimiento en
descubrimiento son de Marcus Goldman. Ambos se van a ir encontrando con pistas
y enigmas, que tendrán que resolver. Mientras somos testigos del proceso de
creación de un best-seller. Produciéndose en cierto momento un giro argumental
espectacular. Lo que me ha mantenido como lectora en vilo hasta el final. El
cual es impresionante, trepidante y sorprendente.
Desde la primera página me ha resultado una novela adictiva, por todo su
conjunto, desde la trama, los temas, la estructura o los personajes, así como
la manera en que el autor nos ha llevado o más bien guiado a su antojo.
Algunas frases del libro:
“Nunca se sabe de qué es capaz la gente. Sobre todo aquellos que creemos
conocer bien.”
“Y yo pensé que una estrella fugaz era una estrella muy bonita que tenía
miedo de brillar, y huía lo más lejos posible. Un poco como yo.”
“No sé si los escritores son solitarios o es la soledad la que empuja a
escribir.”
“Los usuarios de Facebook no son más que hombres-anuncio que trabajan
gratis.”
“La verdad no cambia nada de lo que puede uno sentir por otro. Es el
gran drama de los sentimientos.”
Contracubierta o parte de la misma:
Quién mató a Nola Kellergan es la gran incógnita a desvelar en este
thriller incomparable cuya experiencia de lectura escapa a cualquier tentativa
de descripción. Intentémoslo: una gran novela policiaca y romántica a tres
tiempos – 1975, 1998 y 2008 – acerca del asesinato de una joven de quince años
en la pequeña ciudad de Aurora, en New Hampshire. En 2008, Marcus Goldman, un
joven escritor, visita a su mentor – Harry Quebert, autor de una aclamada
novela --, y descubre que éste tuvo una relación secreta con Nola Kellergan.
Poco después, Harry es arrestado, acusado de asesinato, al encontrarse el
cadáver de Nola enterrado en su jardín. Marcus comienza a investigar y a
escribir un libro sobre el caso. Mientras intenta demostrar la inocencia de
Harry, una trama de secretos sale a la luz. La verdad sólo llega al final de un
largo, intrincado y apasionante recorrido.
Traducción de Juan Carlos Durán Romero