Considero que el duelo es un estado muy personal que cada uno lo pasamos de una manera, incluso la misma persona lo pasará cada vez de una forma (hablo por misma), tal vez similar pero no igual, pues depende de muchos aspectos externos y por supuesto internos, de la época, nuestra edad, las circunstancias, la relación, la situación personal en el mismo momento que sucede, etc.. Así que cuando leo una novela que trata el tema del duelo intento encontrar alguna empatía con el personaje que lo pasa, porque sé que así podré entender mejor lo que, en este caso, la escritora quiere transmitir. Y sí, alguna conexión he tenido, empezando porque hace nada una conocida mía ha enviudado y también tiene dos hijos pequeños, por lo que sin remediarlo le he puesto cara a Giuliana. Además, al haber tenido muertes cercanas me he visto reflejada en algunas actitudes, he reflexionado sobre otras y he recordado que las etapas del duelo, que en esta novela dividen los capítulos, y son Negación, Ira, Negociación, Depresión y Aceptación siempre las he pasado, a veces han sido etapas más largas y en otras ocasiones más cortas, visibles al exterior o sólo en mi interior, pero las he sufrido y sentido.
Es muchísimo mejor esta novela que
otra que trata el mismo tema y que leí este año, “La alargada sombra del amor”
de Mathias Malzieu (reseña aquí), prácticamente no se pueden ni comparar a
pesar de que, digamos, la moraleja final sea que hay que seguir viviendo. En
“La vida era eso” lo dice, pero habla de una manera más directa sobre que la
pérdida está ahí, que hay que aprender a vivir la nueva situación aunque las
ausencias duelan cada día más, también sobre los sentimientos de miedo, culpa,
pena, tristeza y dolor, sobre las situaciones límite que te pone la vida, pero
hay que ser sobreviviente y no víctima, seguir adelante, no olvidar el amor, la
pérdida, lo vivido y lo que queda por vivir.
Introduce las nuevas tecnologías,
el facebook y los whatsapp, como otra forma de relacionarse, una versión más
actual de los grupos terapéuticos, planteando si los grupos de ayuda de verdad
ayudan, y personalmente opino que sí, no los he utilizado en el duelo, pero sí
en una situación complicada, y puedo asegurar que apoyarse en otros resulta
terapéutico. Hablar y escuchar, sentir que no estas sola. Ser fuerte y siempre
sobrevivir.
Sobre el facebook va más allá
exponiendo vivir una irrealidad a través de la red social, y a su vez concluye
con que la realidad virtual no sustituye a la auténtica realidad. Un
planteamiento para reflexionar y debatir.
Muy bonita la referencia a Lucía
Sánchez de Saornil, con su frase “Has jugado y perdiste: eso es la vida.”
Una historia que dentro de la
tristeza tiene sus momentos hermosos, al igual que en otro de sus libros “El
tiempo mientras tanto” (reseña aquí).
Y quien quiera saber como Carmen
Amoraga escribió esta novela este es el enlace (aquí), a mi me ha resultado
curioso saberlo.
Algunas frases del libro:
“El proceso de duelo es
inevitable, cada uno lo vive a su manera. Cualquier cosa que haga que te
sientas mejor, en principio, es beneficiosa para ti.”
“La vida sigue con su maldita cotidianidad...”
“Sabe que, en cualquier momento, en cualquier parte del mundo, en cualquier cultura, personas que nunca se han conocido ni se conocerán reaccionarán de la misma manera ante una pérdida: negándola.”
“Esos momentos cotidianos que nos recuerdan que seguimos vivos y que vale la pena vivir por y a pesar de los obstáculos que se nos presentan cada día.”
Contracubierta o parte de la misma:
La muerte fulminante de su marido
deja a Giuliana devastada y sola con dos hijas pequeñas. Superar un día tras
otro está poniendo a prueba su resistencia y su imaginación, mientras pasa de
la incredulidad al enfado, y de ahí a la idealización de su relación con William.
Descubre entonces, además de
irrepetibles momentos que su memoria convoca una y otra vez, el legado más
hermoso de William: una intensa red de relaciones que le traerán una nueva
forma de estar en el mundo y le enseñarán, gracias al apoyo de los demás, que
aprender a perder es aprender a vivir.
La leí hace poco y me gustó mucho :)
ResponderEliminarBesos!
Laura: sí, a mi también me ha gustado.
EliminarUn abrazo
No hay duelos "iguales", igual que no hay personas "iguales" pero sí hay sentimientos compartidos y la capacidad de ponerse en el lugar del otro.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu reseña y me uno a la recomendación y al mensaje que nos acerca de esa forma tan cercana y accesible. Es una novela que me gustó leer.
Besos
Marilú Cuentalibros: empatía y compartir, son palabras bellas y necesarias.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo
Lleva tiempo entre mis pendientes este libro. A ver cuándo logro hacerle hueco.
ResponderEliminarBesotes!!!
Tengo muchas ganas de leer este libro me gusta mucho el estilo de la autora.
ResponderEliminaralbanta: a mi me gustó mucho en "El tiempo mientras tanto", y ahora ha vuelto a agradarme con este nuevo libro.
EliminarUn abrazo
El tema del duelo es duro, y eso me echa algo para atrás... Pero me da que este libro es de los que merecee la pena leer. 1beso!
ResponderEliminarTizire: ya lo he puesto en la reseña, hace poquito con el libro "La alargada sombra del amor" no me gustó como Malzieu trató el tema del duelo, pero en este de Carmen Amoraga está bien.
EliminarUn abrazo
No me apetece demasiado porque lo anterior que leí de la autora no me gustó mucho, la verdad
ResponderEliminarMarina Ortega: ya, te entiendo, a mi también me condiciona esa situación.
EliminarUn abrazo
El sentimiento es común pero la forma de vivirlo y gestionarlo es personal, ahí es imposible que dos personas vivan las pérdidas, incluso las mismas, de la misma forma. No era un libro que me llamara pero ir conociéndo cómo surgió el libro y cómo se escribió y otras cosas me va animando.
ResponderEliminarBesos
Ana Blasfuemia: sí, me resultó curioso como llegó a esta historia. Y las situaciones de la propia novela las vas interpretando según tu propia experiencia.
EliminarUn abrazo
A este le tengo muchas ganas, no he leído nada de la autora y seguramente empiece por este =)
ResponderEliminarBesotes
Shorby: te puedo recomendar esta novela y la otra que he leído suya, "La vida mientras tanto".
EliminarUn abrazo
tomo nota porque además me serviría para el reto de leer en español (que lo llevo fatal...bueno, llevo fatal todos).
ResponderEliminarUn beso,
Ale.
Ale: mecachis con los retos. Eres (y sois el resto) atrevidas participando en ellos. Yo no me veo capaz, me estresaría intentando llegar.
EliminarUn abrazo
No he leído nada de esta autora pero estoy deseando leer esta novela, me encantan las novelas intimistas. Quizás la compre el próximo finde en la Feria del libro de Madrid.
ResponderEliminarBesos
Margaramon: entonces si la lees ya nos contarás que te parece.
EliminarY cuidado en la feria del libro, que te tienen que caber los libros en casa, jeje.
Un abrazo
Margari: jeje, siempre estamos igual, la lista de pendientes en aumento, pero apetecen tantas lecturas...
ResponderEliminarUn abrazo
ganas A MIL de leerlo.
ResponderEliminarBesos!
Ismael Cruceta: espero que lo puedas hacer pronto. Ya nos contarás qué tal.
EliminarUn abrazo