Libros para leer junto al fuego en invierno y a la sombra de un árbol en verano

Libros para leer junto al fuego en invierno y a la sombra de un árbol en verano

miércoles, 25 de noviembre de 2020

EL INFINITO EN UN JUNCO de Irene Vallejo

Subtítulo: la invención de los libros en el mundo antiguo. 
Premio Nacional de Ensayo 2020 

No puedes perderte “El infinito en un junco” si amas los libros y la lectura. Porque es un viaje al corazón del origen de los libros, que da una gran lección de historia contada como un cuento de aventuras y con unas cuantas anécdotas. Por lo que aunque sea un ensayo, el estilo narrativo lo hace ameno. 
Mientras viajamos entre Grecia y Roma, pasando por Alejandría, y algún salto a la actualidad, junto a los personajes que gobernaron el mundo antiguo, y también con quienes fueron grandes sabios, así como con la sociedad de cada época, va analizando como de la narración oral se pasó a la escritura, como se lee en cada período, según el material de los escritos, por ejemplo la forma especial de leer un rollo de papiro. Y la repercusión de todo esto en la humanidad. 
A su vez presenta el libro como un objeto único, como algo que es imposible poder crear alguna cosa mejor. Además, cuando no existía la imprenta, cada libro era singular. Así que, si desaparecía: “una voz era silenciada para siempre.” 
Hace también referencias a cuando ardió la Biblioteca Nacional de Sarajevo, en la guerra de los Balcanes, y los habitantes de la ciudad llamaron “mariposas negras” a los rescoldos que durante días cayeron sobre ellos. Explicando, además, la coincidencia de que en el libro “Fahrenheit 451” de Bradbury, los bomberos incendiarios usan la misma metáfora. 
Es mucha la información y muchos los datos que aporta, siempre relacionados con libros, bibliotecas, librerías, escritores, películas, directores, etc. Que recopila al final en un índice onomástico. Además de varias páginas de bibliografía. 
Pero no todo lo que narra es historia y referencias, también habla de impresiones como de la sensación de perderte dentro del mundo del libro que estás leyendo, de la lectura de los libros como refugio, como salvavidas interior. En un bonito homenaje al mundo de la escritura y de la lectura. 
Precisamente son muchas las frases que me han gustado, por lo que dicen, por lo que transmiten. Aquí solo he puesto unas pocas. Así que os recomiendo que leáis este libro, porque os va a aportar mucho. 

Algunas frases del libro: 
“La pasión del coleccionista de libros se parece a la del viajero. Toda biblioteca es un viaje; todo libro es un pasaporte sin caducidad.” 

“Leer es un ritual que implica gestos, posturas, objetos, espacios, materiales, movimientos, modulaciones de luz. Para imaginar cómo leían nuestros antepasados necesitamos conocer, en cada época, esa red de circunstancias que rodean el íntimo ceremonial de entrar en un libro.” 

“Toda sociedad aspira a perdurar y ser recordada. El acto de escribir alargaba la vida de la memoria, impedía que el pasado se disolviera para siempre.” 

“Donde los documentos se eliminan y los libros no circulan libremente, es muy fácil modificar a placer, impunemente, el relato de la historia.” 

“Las librerías son esos territorios mágicos donde, en un acto de inspiración, escuchamos los ecos suaves y chisporroteantes de la memoria desconocida.” 

Contracubierta o parte de la misma: 
Este es un libro sobre la historia de los libros. Un recorrido por la vida de ese fascinante artefacto que inventamos para que las palabras pudieran viajar en el espacio y en el tiempo. La historia de su fabricación, de todos los tipos que hemos ensayado a lo largo de casi treinta siglos: libros de humo, de piedra, de arcilla, de juncos, de seda, de piel, de árboles y, los últimos llegados, de plástico y luz. 
Es, además, un libro de viajes. Una ruta con escalas en los campos de batalla de Alejandro y en la Villa de los Papiros bajo la erupción del Vesubio, en los palacios de Cleopatra y en el escenario del crimen de Hipatia, en las primeras librerías conocidas y en los talleres de copia manuscrita, en las hogueras donde ardieron códices prohibidos, en el gulag, en la biblioteca de Sarajevo y en el laberinto subterráneo de Oxford en el años 2000. Un hilo que une a los clásicos con el vertiginosos mundo contemporáneo, conectándolos con debates actuales: Aristófanes y los procesos judiciales contra humoristas, Safo y la voz literaria de las mujeres, Tito Livio y el fenómeno fan, Séneca y las posverdad... 
Pero, sobre todo, esta es una fabulosa aventura colectiva protagonizada por miles de personas que, a lo largo del tiempo, han hecho posibles y han protegido los libros: narradores orales, escribas, iluminadores, traductores, vendedores ambulantes, maestras, sabios, espías, rebeldes, monjas, esclavos, aventureras... Lectores en paisajes de montaña y junto al mar que ruge, en las capitales donde la energía se concentra y en los enclaves más apartados donde el saber se refugia en tiempos de caos. Gente común cuyos nombres en muchos casos no registra la historia, esos salvadores de libros que son los auténticos protagonistas de este ensayo. 

Imagen de la cubierta: Papyrus, de James Bruce / Yale center for British Art, Paul Mellon Collection, USA / Bdridgeman Images

miércoles, 18 de noviembre de 2020

LA NENA de Carmen Mola


Este libro es la tercera entrega de la serie protagonizada por la inspectora Elena Blanco. La primera es “La novia gitana” (reseña aquí) y la segunda es “La red púrpura” (reseña aquí). Aconsejo seguir el orden porque ayuda a entender mejor a los personajes, aunque la trama de esta tercera novela es mas independiente que las dos anteriores. 
En “La nena” la parte principal del argumento se centra en Chesca, que es un personaje conocido de los libros anteriores, por lo que la autora ha conseguido que me involucre mas en lo que va pasando, pues igual que sus compañeros se vuelcan en la investigación yo, como lectora, también me he sentido partícipe del equipo. 
Está dividida en cuatro partes, comenzando cada una con unas páginas escritas en cursiva que complementan el momento actual y ayudan a componer el mapa de los hechos y de los personajes. 
Aviso que el relato es para estómagos fuertes (me ha recordado al libro “Alex” de Pierre Lemaitre, reseña aquí) por algunas escenas escabrosas, algo repugnantes, pero a su vez por la forma de describirlas sin llegar a profundizar en detalles pero dando los datos justos y necesarios para que nuestra imaginación recree la escena completa. 
Como los anteriores libros, “La nena” es un buen thriller que te mantiene en tensión de principio a fin. 
No sé si habrá más entregas de esta serie, pero como ahora tiene un nuevo miembro en el equipo de policías, más el camino que pueda tomar el personaje de Elena Blanco, estaría bien que hubiera nueva novela. Con el añadido de que continua la incógnita de quien está detrás del pseudónimo Carmen Mola. 

Algunas frases del libro: 
“Todos tenemos secretos y hay que respetarlos; cuando una persona se queda sin secretos los ha perdido todo.” 

Contracubierta o parte de la misma: 
Es la noche de fin de año chino, empieza el año del cerdo, Chesca, al mando de la Brigada de Análisis de Casos desde hace un año, ha quedado con Angel Zárate, pero en el último momento este le da un plantón. Aún así, ella sale a divertirse, conoce a un hombre y pasa la noche con él. La mañana siguiente, tres individuos rodean su cama y un repulsivo olor a cerdo impregna el dormitorio, Después de un día entero sin tener noticias de su compañera, los miembros de la BAC comienzan a buscarla. Cuentan en su empeño con una ayuda inestimable: la de Elena Blanco, que dejó la Policía tras la debacle que supuso el caso de la red Púrpura pero es incapaz de dar la espalda a una amiga, aunque los celos pueden jugarle una mala pasada. Muy pronto la brigada irá atisbando el horror, físico y moral, del que Chesca no es la única víctima. 

Imagen de la cubierta: Miguel Tejedo

lunes, 9 de noviembre de 2020

EL HILO INVISIBLE de Gemma Lienas


En el título de este libro, el hilo invisible, he visto un doble significado. Por un lado el que va estirando la protagonista de esta historia, Julia, en plena crisis de identidad, y que le ayudará a remontarse hacia los orígenes de su familia francesa. Por otro lado el descubrimiento de la doble hélice del ADN, y el papel que jugó la cientítica Rosalind Franklin. Y ambas cuestiones tienen en común la información genética. 
La trama sucede en el verano de 2009. Pero la autora crea un punto de suspense porque el primer capítulo empieza en agosto, para continuar en el mes anterior, dejándonos la incertidumbre de qué irá pasando hasta llegar a ese punto. A su vez tiene un salto a septiembre, unos datos de 1940, otros de 1968 y también de 2008, que mas bien son aclaraciones de situaciones para el lector, por lo que acabamos teniendo más información que el personaje principal. 
La ambientación es en la isla de Batz, que está frente a la costa de la Bretaña francesa, un lugar descrito como muy tranquilo y de mucha belleza paisajística. Allí es donde está la casa familiar y donde se van a reunir 4 generaciones para celebrar los 100 años de Yvonne, bisabuela de Julia. Un reencuentro que sacará a la luz secretos familiares, que llevan demasiado tiempo escondidos. 
Y lo que parece un sencillo argumento sobre una historia familiar, sin embargo, plantea cuestiones importantes como es el papel de la mujer en una sociedad anticuada y retrógrada, entrelazando el momento actual con los propios sentimientos de culpa de Julia por no querer ser madre (pues parece que su actitud sea contra natura, mas bien contra sociedad). Y los años 50 cuando dos mujeres intentaron ser ellas mismas. Por un lado la figura de Rosalind Franklin que trabajó a la sombra de los hombres, sobre todo de James Watson (a quien por cierto lo describe de tal manera por sus actitudes antes las mujeres que he acabado viéndolo como un ser despreciable). Por otro lado el personaje (también real) de la pintora surrealista Remedios Varo. 
Otra cuestión interesante es la relacionada con la ocupación alemana en Francia en la Segunda Guerra Mundial, que lleva al asunto de los niños robados y la perfección de la raza aria. Por lo que vuelve a aparecer el tema de la genética. Así como también trata las enfermedades hereditarias. 
Una curiosidad, o mas bien ha sido una casualidad por el momento actual que vivimos, ha sido leer en este libro sobre la gripe española, explicando su origen y como se desarrolló, así como habla de pandemias. 
Ha sido una lectura que ha ido cogiendo fuerza según avanzaba la trama. Con un argumento atractivo por los temas, y el contrapunto de ir viendo como se escribe un guión para un documental. 

Algunas frases del libro: 
“¿Y sabes la información que te llega a dar sobre una persona los libros que tiene? Observas su biblioteca y sabes como piensa.” 

Contracubierta o parte de la misma: 
Las dudas atormentan a Julia: ¿De verdad quiere a su marido? ¿Está dispuesta a ser madre? ¿Terminará a tiempo el guion que escribe sobre el verdadero papel de la científica Rosalind Franklin en el descubrimiento de la doble hélice del ADN?
Con el objetivo de huir de tanta incertidumbre, acepta una invitación de su familia francesa para pasar el mes de agosto en la isla de Batz, en la costa bretona. Allí, en la vieja casona familiar, y al lado del mar, la esperan una bisabuela imponente, un tío abuelo extrañamente melancólico y un tío, librero de anticuario, muy atractivo.
Gracias a la capacidad de observación de Julia, que capta un detalle enigmático en unas fotografías antiguas que se remontan a la segunda guerra mundial, lo que tendrían que haber sido unas vacaciones familiares pronto se convertirán en unos días de investigación sobre sus orígenes y su identidad. 

Traducción de Gemma Lienas 
Título original: El fil invisible 

Imagen de la cubierta: Erin Cone