Ya había leído a Pierre Lemaitre, y son recomendables todos sus novelas, pero además “Nos vemos allá arriba” es especial.
Porque
ya en el primer párrafo dice tanta verdad de un modo tan sutil, que
sienta las bases del genial estilo narrativo que nos vamos a
encontrar en este libro. Que comienza con la Primera Guerra Mundial
en Francia, con escenas (pocas) muy bien descritas y detalladas, en
las que casi puedes sentir el sufrimiento de los hombres. Para pasar
a tratar como tema principal las consecuencias de la guerra, que
incluso cuando termina ofrece grandes negocios a unos pocos. Mientras
los excombatientes sobreviven como pueden, bajo el desánimo y la
resignación. Son hombres jóvenes que se jugaron la vida en el campo
de batalla, algunos mutilados, que han sobrevivido pero ¿a qué
precio?
Entre
ellos están Albert Maillard y Édouard Péricourt, dos desconocidos
unidos por sus heridas de guerra y por una historia en común en la
que se han jugado la propia vida. Ahora conviven y sobreviven como
pueden. Manteniendo una amistad y ayudándose mutuamente, cada uno
dentro de sus posibilidades.
Maillard
vive bajo la sombra de su particular pesadilla vivida, pero también
bajo la temible amenaza de uno de sus superiores, Pradelle, que
parecía tenerlo vigilado mientras duró la contienda. Aparte,
conoceremos algo más de su personalidad por ciertas aportaciones de
su madre, que me ha dejado la sensación de que es su “Pepito
Grillo”.
Por
otro lado Édouard no quiere regresar a su casa, ni tener contacto
con su familia, por el tremendo estado físico en que se encuentra y
porque allí no espera recibir lo que necesita, ya que antes de la
guerra tampoco lo recibió. Mientras tanto su padre quiere expiar su
culpa, porque reconoce no haber sido un buen padre, y necesita su
particular limpieza de alma, pues tenían el final de su historia
pendiente, así quiere erigir un gran monumento conmemorativo en
honor de los combatientes fallecidos.
Los
caminos de los dos amigos avanzan hacia la venganza y, a veces sin
saberlo, se van entrecruzando con su antiguo teniente
d'Aulnay-Pradelle y con el padre y la hermana de Édouard Péricourt.
Lo que crea cierta intriga por saber como terminará esta historia de
posguerra, en la que se ve claramente la diferencia entre ricos y
pobres, y hasta donde es capaz de llegar el ser humano,
aprovechándose de una tremenda situación, con tal de hacer
negocios, incluso con los muertos de la guerra, aunque no contaban
con la integridad de un funcionario, Merlin. Siendo también este
relato una denuncia social y política a hechos no tan diferentes de
la realidad.
Algunas frases del libro:
“Por
lo demás, lo único que hacemos desde que acabó la guerra es
esperar. Al final pasa lo mismo que en las trincheras. Tenemos un
enemigo al que no vemos, pero al que notamos con todo su peso.
Dependemos de él. El enemigo, la guerra, la burocracia, el ejército:
todo viene a ser lo mismo, cosas que nadie entiende ni sabe
resolver.”
“Hasta las mayores alegrías dejan un pozo de tristeza. En toda experiencia hay siempre un sentimiento de carencia.”
“Sabía que de todo se recupera uno, pero desde que había ganado la guerra, tenía la sensación de perderla un poco más cada día.”
“Aquel hombre sin cara le hacía al mundo un inmenso corte de mangas, que lo colmaba de júbilo y lo ayudaba a reconciliarse con lo que siempre había sido y había estado a punto de perder.”
“La guerra había sido una prueba terrible pero no era nada comparada con aquellos dos años de paz, que en determinados momentos adquirían visos de descenso a los infiernos.”
Contracubierta o parte de la misma:
En
noviembre de 1918, tan sólo unos días antes del armisticio, el
teniente d'Aulnay-Pradelle ordena una absurda ofensiva que culminará
con los soldados Albert Maillard y Édouard Péricourt gravemente
heridos, en un confuso y dramático incidente que ligará sus
destinos inexorablemente.
Édouard,
de familia adinerada y con un talento excepcional para el dibujo, ha
sufrido una horrible mutilación y se niega a reencontrarse con su
padre y su hermana. Albert, de origen humilde y carácter pusilánime,
concilia el sueño abrazado a una cabeza de caballo de cartón y está
dispuesto a lo indecible con tal de compensar a Édouard, a quien le
debe la vida. Y Padrelle, aristócrata venido a menos, cínico y
mujeriego, está obsesionado con recuperar su estatus social. De
regreso a París, los tres excombatientes se rebelarán contra una
realidad que los condena a la miseria y al olvido. Así, Édouard
pergeña una ingeniosísima estafa con el fin de vengarse de su
progenitor, que siempre lo repudió por su sensibilidad y sus
habilidades artísticas. De paso quiere ayudar al fiel Albert, cuyo
prurito es huir a las antípodas para olvidar a Cécile, su amor
perdido. Aunque tal vez el más ambicioso sea Pradelle, que sacudirá
la conciencia de Francia entera mediante una monumental operación
delictiva concebida para amasar una rápida fortuna. Los escollos son
considerables, pero la voluntad de los tres parece infinita.
Traducción
del francés de José Antonio Soriano Marco
Imagen de cubierta: Lou Ros
Imagen de cubierta: Lou Ros
Otros
libros de este autor reseñados en este blog: “Vestido de novia”
(enlace aquí), “Irene” (enlace aquí), “Alex” (enlace aquí),
“Tres días y una vida” (enlace aquí)
He leído reseñas de esta novela y aunque no he leído nada de esta autor sí que me gustan las historias de posguerras y, por lo que cuentas, ésta puede ser de las mias, así que tomo nota del título. Un saludo!
ResponderEliminarTambién he leído un par, y me gustan mucho pero el tema central de esta, la guerra y el sufrimiento no es ahora para mí. La dejo guardada para más adelante.
ResponderEliminarBesod
Buenas.
ResponderEliminarMe decanto más por las historias de guerra, propiamente dicha, que de posguerra así que creo que lo dejaré pasar.
Un saludo y gracias por la reseña.
No he leído nada del autor y no sé la verdad qué me apetece más, si esta novela, que me apetece muchísimo, o alguna de sus novelas negras.
ResponderEliminarBesos.
Pues sigo sin haber leído nada de este hombre, ¿te lo puedes creer? Y voy anotando todas las novelas suyas que veo, como la que nos traes hoy, que seguro que me encanta.
ResponderEliminarbsos!
De momento solo he leído Vestido de novia y me gustó muchísimo. Tengo miedo de leer algo más y porque superarlo va a ser muy difícil.
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