La
lectura de este libro ha sido como subir en una montaña rusa, pues
la intensidad del argumento sube y baja continuamente, creando
momentos de mayor y de menor intensidad. Pasando de la intriga,
angustia y desesperación en momentos puntuales (como cuando se
enfrenta a sus sueños), a otros donde parece que no sucede nada
(como el recorrido por medio Estados Unidos), dedicándole más
detalles a unas partes que a otras. Lo mismo que sucede con los
personajes, profundiza más en unos que en otros, incluso quedándose
algunos que parecían tener un papel importante en simples
secundarios. La historia se desarrolla combinando el presente y el
pasado, hasta que se unen los dos tiempos.
El
centro de todo es David Winkler, quien con 59 años regresa a su casa
en Ohio después de 25 años viviendo en Las Granadinas. Pues le ha
llegado el momento de buscar a su mujer y a su hija, de las que no
sabe nada desde que huyó desesperado porque había soñado que
Grace, su hija de pocos meses, moriría ahogada. Una decisión in
extremis, tal vez incorrecta o tal vez no, se enfrentó a sí mismo,
y sólo quería salvar a su hija. Y fue en ese momento cuando su vida
sufrió un cambio radical, y todo empezó a ser un caos. Y es que
David de vez en cuando tiene sueños premonitorios, algunos predicen
cosas descabelladas, otros situaciones del día a día y en ocasiones
sueños clarividentes. Así fue como en 1975 en Anchorage (Alaska)
conoció a Sandy, su mujer, en un supermercado, porque anteriormente
lo había soñado y sabía que se le iba a caer una revista. Pero el
sueño que le atormenta es el tiene reiteradamente sobre Grace, no
logra apartarlo de su mente, lo revive una y otra vez, y su mujer
cree que tan sólo es una pesadilla, y ante tal situación de
angustia, más el añadido de su sonambulismo, hace que huya. Y acaso
al marcharse ¿podrá interferir en el orden de las cosas? ¿acaso el
futuro está predestinado?
Me
ha parecido que la parte de los sueños se queda corta, tenía la
sensación de que iba a ser lo principal de la novela, pero sólo lo
es puntualmente. Incluso hay una pequeña referencia a que Sandy
sabía que él se acercaría en ese supermercado porque tuvo la
sensación de que ya lo había vivido. Un tema que tiene relación
con la premonición y se queda así, sin más, una simple frase.
De
manera contraria hay otro tema en el que se extiende bastante, que es
la investigación sobre los insectos que está realizando otro
personaje de la novela, Naaliyah. Que resulta interesante por la
parte científica, pero que no le he visto la conexión con la trama.
También
está el tema de la amistad, por una parte con Soma, su marido Félix
y su hija Naaliyah en Las Granadinas, quienes aparecen en el momento
oportuno, y tienen su propia historia a las espaldas, pues tuvieron
que salir huyendo de Chile para poder sobrevivir. Por otra parte en
otra etapa encuentra un gran apoyo en Herman, siendo una relación de
lo más curiosa y un tanto excepcional por el vínculo que los ha
unido.
Además
durante todo el libro hay continuas referencias a la hidrología y,
es más, el agua tiene un papel importante. El propio David es
hidrólogo, trabaja en el servicio metereológico, y desde pequeño
tiene pasión por la nieve, rayando lo obsesivo. Su madre nació en
Finlandia y tenía un libro titulado “Cristales de nieve” de W.A.
Bentley, el cual le influye muchísimo. Y aquí viene otra vez toda
una parte científica sobre este tema, que además me ha servido para
buscar información al respecto y resulta que Bentley existió
realmente y publicó ese libro en 1931, quién desde pequeño estuvo
entusiasmado con
los fenómenos meteorológicos,
especialmente con la nieve.
Fue pionero en el estudio de los cristales de hielo
que
forman los copos de nieve. Adaptó un microscopio a una cámara
fotográfica, y durante años intentó captar una imagen donde se
viera la estructura de los cristales de hielo, lográndolo en 1885,
a partir de aquel día, no cesó de capturar y estudiar más de 5.000
cristales de nieve, no encontrando jamás dos cristales iguales. Así
que en este libro pienso que Anthony Doerr con su personaje de David
Winkler recuerda y homenajea a este profesional que desde entonces ha
sido conocido como The Snowflake Man (el hombre copo de nieve).
Algunas frases del libro:
“La
memoria galopa, luego se detiene y da un giro inesperado; para la
memoria, el orden de los acontecimientos es arbitrario.”
“Había sentido el vértigo del futuro alineándose con el presente.”
“El futuro tenía una cita con él y lo esperaba.”
“Si tal vez no podemos cambiar quiénes somos, si el lugar del que procedemos dicta el lugar en el que terminaremos.”
Contracubierta o parte de la misma:
Desde
su niñez en Alaska, David Winkler ha vivido obsesionado por la
nieve. Además, David tiene un don: a veces puede ver cosas antes de
que ocurran. Sus premoniciones le permiten saber que un vecino será
atropellado por el autobús o que se enamorará de una mujer en un
supermercado. Peri cuando David sueña que su hija se va a ahogar en
una inundación sin que él pueda salvarla, toda su vida se
desmorona. Huir de su familia, de su casa y de su propio futuro
parece el único modo de negar el sueño que lo atormenta.
Solo,
sin medios y sin saber si su hija ha sobrevivido o si su mujer ha
conseguido perdonarlo. David tendrá que comenzar una nueva vida.
Hasta el día que deba enfrentarse a la decisión de buscar a las
personas que dejó atrás.
Traducción
de Laura Vidal
Hemos coincidido hoy en la reseña, jeje. Estoy de acuerdo contigo, un libro lleno de altibajos pero escrito con una prosa exquisita. Besos
ResponderEliminarMe apetece ver cómo escribe su autor aunque voy con las expectativas algo bajas, lo tengo pendiente en lectura conjunta así que al menos me quedaré con su estilo. Y me ha parecido curioso lo de que Bentley realmente existiera.
ResponderEliminarBesitos
A ver qué me depara a mi esta montaña rusa. Voy con expectativas bajas.
ResponderEliminarBesos
Pues no me anima mucho, el tema insectos y metereología no me llaman. Sí lo de las premoniciones que para ser el origen de la historia parece que lo deja aparcado. Me hubiera gustado si fuera lo principal.
ResponderEliminarBesos
Lo voy a empezar a leer esta misma semana y la verdad es que no voy con mucho ánimo.
ResponderEliminarBesos.
Mis expectativas con este libro están ya a cero, por las reseñas que estoy viendo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Las expectativas están por los suelos. Lo empiezo mañana en conjunta, y a ver que.
ResponderEliminarUn beso :)
Yo disfruté bastante con su lectura y desconocía el dato real sobre Bentley. Gracias por la información.
ResponderEliminarBesos.
Me gustó mucho "La luz que no puedes ver" así que no descarto leer este, aunque parece que no es como el anterior...
ResponderEliminarAbrazo!
Lo he leído hace nada y, al igual que el anterior, se meq ueda en simplemente entretenido
ResponderEliminarBesos
Pues no sé si me gustaría, no lo veo muy de mi estilo. No sé, a ver si lo ojeo.
ResponderEliminarbsos!